El elegido

A mediados de invierno
cuando la lluvia cae madura
sobre los rostros palidos
y al borde del precipicio
se balancea la vida.
Aparece de pronto
el relampago azul
que lo ilumina todo.
No puede ni el gigante mar
venir en indiferencia
entre tanta luz
que va alumbrando el campo.
brilla en nuestra mente
el amor por el elegido
llegando al centro del dia.
A mediados de invierno
vienen ilicitos enjambres
de tremulas avecillas
muertas de frio, mientras el relampago ilumina la mente
pensando en el elegido.-